Por: Marteen Zárate

Traducida como la postura del pequeño rayo, laghuvajrāsana se asemeja a un chispazo o relámpago que toca desde el cielo hasta la tierra. Es una extensión hacia atrás (arco) que requiere mucha fuerza y confianza principalmente en las piernas.

laghu – pequeño, delicado, bello

vajra – rayo, diamante

asana – sentado, postura

Efectos: Tonifica la columna vertebral y ejercita el coxis. La práctica regular de esta postura alivia dolores y desplazamientos discales en la región inferior de la columna. Gracias al arco, los músculos abdominales y el pecho se expanden completamente.

Una postura preparatoria puede ser ustrāsana o postura del camello.

Para entrar a la postura primero, comienza con las rodillas en el piso, alineando las pantorrillas y los pies hacia atrás. Mantén el sacro hacia adelante y extiéndete hacia atrás tomando los talones con tus manos como si fueras a la postura del camello. Extiéndete más hasta tomar fuertemente tus pantorrillas o si es posible las rodillas con tus manos. Extiende también tu cuello dejando la cabeza hacia atrás. Sin soltar tus pantorrillas o rodillas lleva la cabeza hasta el suelo. Manténte ahí 5 respiraciones ó 45 segundos. Para salir mantén la curvatura de tu espalda y empuja rodillas y empeines contra el piso a la vez que presionas tus pantorrillas con tus manos. Sube poco a poco, lo último que sube es la cabeza.

Cuesta un tiempo dominar la forma de entrar y salir sin embargo son las formas más seguras para tener una práctica segura y beneficiosa.