Meditación y Respiración en YOGA En la Vida para ser FELIZ para LA PAZ INTERIOR para la CALMA

Meditación y Respiración en Yoga

Por Dr. Priscilla Flores

La respiración y meditación han sido una parte fundamental de la práctica de yoga desde hace miles de años. Mucha atención se le ha otorgado a la investigación de la meditación por sus grandes beneficios y estudios más recientes se han enfocado en la respiración.

En el yoga la respiración se conoce como pranāyama que se podría definir en un término general como el flujo de la energía vital y existen numerosas técnicas para practicarla, cada una con sus beneficios específicos.

En nuestra época la palabra estrés es bien conocida por todos y se puede inferir que la gran mayoría lo ha experimentado alguna vez en su vida. Se considera que el estrés viene de las grandes fluctuaciones (oscilaciones) de la mente, de los pensamientos constantes, de una desconexión en el presente por recuerdos del pasado o pensamientos del futuro.

Se sabe que la mente y la respiración tienen una relación muy estrecha; algunos estados emocionales pueden afectar la frecuencia, la profundidad y el patrón de respiración, y por otro lado, la respiración voluntaria (manipulada) puede inducir cambios en la mente y conciencia.

Este es un conocimiento común, ¿cuántas veces no hemos escuchado que hay que respirar profundo y/o contar hasta 10 cuando estamos enfadados e irracionales?

En la última década se han realizado numerosos estudios que recolectan evidencia científica sobre los beneficios del pranayama y los resultados han sido sorprendentes:

Algunos tipos de respiración activan el sistema nervioso parasimpático y reducen el simpático. El sistema nervioso parasimpático es el que se encarga de funciones involuntarias, de la producción y restablecimiento de la energía corporal y que su “activación” con la respiración (más allá de la activación fisiológica normal) se ha asociado a una mejor regulación emocional y respuestas de empatía, y al alivio del estrés, ansiedad y depresión mediante la producción de cambios fisiológicos en sistema nervioso central, sistema cardiovascular y hormonas; por otro lado, la disminución de estos cambios se ha observado en pacientes con trastornos de ansiedad y pánico, depresión, síndrome de intestino irritable, enfermedad de Alzheimer precoz y obesidad, por lo que se cree que la práctica de pranayama podría ayudar a retrasar o anular su aparición.

Estos cambios se han evidenciado con algunos tipos específicos de pranāyama , entre ellos:

  • Anuloma viloma y Kevala Kumbhaka, o respiración yógica, y respiración yógica con retenciones; las clásicas, las más estudiada, asociada con los cambios antes mencionados
  • Ujjayi o respiración vigorosa que reduce la excitación mental (con cambios fisiológicos) en situaciones de estrés, ansiedad y pánico
  • Bhastrika o exhalaciones rápidas y forzadas, que se ha asociado a la excitación del sistema nervioso central, a una mayor actitud de alerta, contraria al resto de las técnicas

Los practicantes experimentados muestran actividad mental más sincrónica en estudios de electroencefalografía (actividad cerebral), que se relaciona a función cerebral integrativa y solución de problemas; y los cambios van más allá del funcionamiento ya que algunas prácticas incluso se han asociado a cambios físicos cerebrales como incremento del tejido neuronal y una mayor flexibilidad (neuroplasticidad) que se podrían ver involucradas en la memoria, aprendizaje, control y emocional, y la preservación y/o ralentización del envejecimiento cerebral.

Las prácticas de pranayama preparan a la mente para una meditación más profunda que algunos principiantes encuentran difícil de lograr por sí mismos, y que al concluir evoca una sensación de paz, de resolución de conflictos internos y una sensación subjetiva de claridad mental, que finalmente reducen el estrés.

Es indispensable acercarse a un maestro calificado y experimentado para la enseñanza de las diferentes técnicas de manera segura y la elección de la práctica adecuada, que sin duda alguna, proveerán beneficios que sobrepasan incluso sus indicaciones.

¡Namasté!

Referencias Bibliográficas

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La Dra. Priscilla Flores es médico de formación con especialidad en Medicina del Deporte y Rehabilitación, Co-fundadora de YAI Yoga Anatomy Institute, egresada del entrenamiento para maestros Sadhak Pravesa 300 hrs en el año 2015 y del programa avanzado Arudha 600hrs. Practicante formal de Yoga desde el 2011 Priscilla gusta por encontrar un balance entre la ciencia de la medicina con la ciencia del yoga.